La Universidad de Southampton en Inglaterra ha descubierto lo que podría ser una debilidad del nuevo coronavirus (SARS-CoV-2) causante de la enfermedad Covid-19.
La investigación revela que la cúspide del virus (el conjunto de proteínas que rodea al material genético del virus) no es tan grueso como se pensaba.
Esta debilidad del virus da a los científicos una esperanza de desarrollar una cura contra el virus que se ha propagado por el mundo y ha causado la muerte de al menos 160 mil personas y ha dejado más de dos millones y medio de infectados.
El virus SARS-CoV-2 tiene una gran cantidad de espigas que sobresalen de su superficie que utiliza para unirse y entrar en las células del cuerpo humano.
Estos picos están recubiertos de azúcares, conocidos como glicanos, que disfrazan sus proteínas virales y los ayudan a evadir el sistema inmunológico del cuerpo.
“Al cubrirse de azúcares, los virus son como un lobo con piel de cordero”, explicó el profesor Crispin.
“Pero uno de los hallazgos clave de nuestro estudio es que, a pesar de la cantidad de azúcares que hay, este coronavirus no está tan bien protegido como otros virus”.
Tal y como explica el estudio, una menor densidad de glicanos en el virus supone una mayor facilidad para nuestro organismo para neutralizarlo con la ayuda de anticuerpos.
“Esto supone un mensaje muy esperanzador para el desarrollo de la vacuna”, concluye el experto.
Sé el primero en comentar